CARVALHO, Soraia de.; http://lattes.cnpq.br/8465975651556260; CARVALHO, Soraia de.
Resumo:
Esta tesis tiene como objeto de estudio dos distintas salidas para crisis de
hegemonía en el proceso político boliviano: la Asamblea Popular de 1971 y la
Asamblea Constituyente, instalada en 2006, que resultó en el nuevo texto
constitucional promulgado en 2009, bajo el gobierno de Evo Morales. La
perspectiva metodológica adoptada fue la del materialismo histórico e dialético
Analiza, cuanto a la independencia de clase: cual la relación con las clases y
fracciones dominantes y el Estado; como las ilusiones democráticas se
manifestaron; sus propuestas en relación al funcionamiento del sistema judicial.
Identifica en cada experiencia la forma cómo se dio la alianza entre las clases,
fracciones de clases y nacionalidades oprimidas. Debate el abordaje de temas como
el control de la producción; la cuestión agraria y de las nacionalidades indígenas,
así como la política militar de cada una de ellas. A partir de estos puntos de análisis,
identifica que son experiencias que adoptaron rumbos opuestos. La primera
impulsó la lucha de clases mientras que la segunda la contuvo en el marco de la
democracia burguesa. La Asamblea Popular era parte de la estrategia revolucionaria
del proletariado boliviano, se constituyó como un órgano embrionario de poder dual
que se ha mantenido independiente ante las clases dominantes y su Estado. La
vigencia del pacto militar-campesino ha impuesto dificultades en la incorporación
de esta clase a la Asamblea. El golpe militar del 21 de agosto de 1971 interrumpió
el desarrollo de esta experiencia. La Asamblea Constituyente inaugurada en 2006 se
organizó en torno a una estrategia democratizante, como una salida burguesa a la
crisis de legitimidad de las instituciones estatales, profundamente abaladas por la
aplicación de las políticas neoliberales que llevaran al país a una situación prerevolucionaria,
con los levantamientos bautizados como la Guerra del Agua en el
año 2000 y la Guerra del Gas en 2003. Las negociaciones que acabaron
modificando el texto aprobado por los constituyentes expone que los mencionados
delegados no tuvieron control sobre el resultado del proceso político y que los
conflictos entre el gobierno Morales, las comunidades indígenas y otros segmentos,
bajo la vigencia de la nueva Carta demuestran los límites de los medios legales y
parlamentarios para que los explotados conquisten sus reivindicaciones.